¡Una ruta como salida de un cuento de hadas! Si hay algo que nos gusta de la comarca del Vallés Oriental es la magia que reúne cada rincón que conocemos y la historia que rodea toda esta hermosa región de Cataluña. En esta ruta por los castillos del Vallés Oriental, visitaremos los pueblos de Caldes de Montbui, Bigues i Riells y Tagamanent; dejándonos seducir por su encanto medieval.
Si por el contrario, lo que mas te interesa es la capital Catalana, también tenemos propuestas de las mejores cosas que hacer en Barcelona.
En esta ocasión os proponemos hacer un recorrido por los mejores castillos y miradores del Vallès Oriental. En esta Ruta desde la Torre Roja al Turó de Tagamanent, nos adentraremos por los secretos mejor guardados e historia de estos increíbles castillos.
Para esta ruta os recomendamos preparar unos ricos sándwiches para el camino, llevar una buena cámara de fotos o el móvil bien cargado, para no perderos de unas buenas fotografías, por lo demás no os preocupéis ya que en Willy´s plan nos encargamos de que esta ruta fuera totalmente gratis.
Empezaremos esta excursión por la Torre Roja, esta torre está situada en el pueblo de Caldes de Montbui. Esta antigua edificación servía como resguardo y vigilancia del pueblo durante las épocas de las conquista y hoy en día fue declarada Bien de Interés Cultural Nacional. Aquí no olvidéis visitar las ruinas del poblado íbero, una zona que se conserva en ruinas, pero no por ello deja de ser importante para el legado de este lugar.
El segundo punto, es el Castillo de Montbui, situado en Bigues i Riells. Este castillo fue documentado en el año 987 y es uno de los más antiguos de los alrededores.
Finalmente, llegamos al Turó de Tagamanent, donde encontramos una fortificación medieval de piedra con unas vistas panorámicas espectaculares al pueblo de Tagamanent.
Torre Roja
En este primer lugar de este recorrido, subiremos al cerro de la torre roja, para conocer el hito entre los municipios de Sentmenat y Caldes de Montbui. Esta construcción se encuentra justo en el antiguo poblado ibérico, donde permanecen en ruinas la antigua ermita de San Miguel del Arn y el salto y poza de en Pèlags; construcciones que trazan la historia de este recinto.
Cuenta la historia que esta torre ubicada en uno de los cerros más altos del pueblo servía como torre de vigilancia, para la protección del pueblo y sus habitantes durante las épocas de la conquista y fueron los romanos los que le dieron continuidad a su construcción e influyeron en el aire románico que puede apreciarse en la mayor parte de su estructura.
Cuando estéis en este lugar, no olvidéis preguntar sobre la polémica disputa que represento su construcción y como lograron terminar esta estructura medieval.
Castell de Montbui
En nuestro recorrido por los castillos del Vallés Oriental, llegamos al Castell De Montbui. Como dato curioso, este castillo recibe su nombre por ser propiedad y vivienda de la “familia Montbui”, quienes lo habitaron la mayor parte del siglo XIII. Luego de varias sucesiones este castillo llego a manos de la corona hacia el año de 1714 y fue por esta misma razón que sufrió varias modificaciones en su diseño y arquitectura.
Aunque en la actualidad el Castillo de Montbui se encuentra en ruinas, aun se logra apreciar los notables lienzos de sus muros hechos de piedra inclinada, los sillares rectangulares y aún conserva su estructura poligonal. Sin duda un lugar que debéis conocer si lo que buscas es un recorrido lleno de historia y mucha cultura.
Turó de Tagamament
Como su nombre indica «Turó de Tagamanent», pertenece al pueblo que lleva su mismo nombre. Esta fortificación se encuentra en uno de los parques más importantes de Cataluña, el Parque Natural del Montseny. El castillo de Tagamanent, guarda restos de los primeros indicios de población de la provincia de Barcelona, de los cuales aún se logran identificar iglesias, capillas medievales, grandes masías, entre otros; que fueron construyéndose en el camino que conduce a esta bonita montaña.
Lo más increíble del Turó de Tagamanent y por supuesto una de las razones que siempre nos motiva a visitarlo, son sus increíbles vistas panorámicas al pueblo. Algo que si pudiéramos describir en una sola palabra, seria “fascinantes”. No sacarse una foto en este lugar, es imperdonable.